La estructura de poder en la República Popular China se apoya en tres ámbitos fundamentales: el Partido, y, subordinados a éste, el Ejército y el Estado. La jefatura del Estado corresponde al presidente de la República, mientras que el líder del Partido es su secretario general y el líder dell Ejercito de Liberación es el Presidente de la Comisión Central.
En la actualidad, estos tres cargos están ocupados por un mismo hombre, Hu Jintao, tal como había ocurrido con su antecesor Jiang Semin. Esta tendencia a nombrar a una misma persona para los tres cargos pretende evitar las luchas por el poder que esta estructura tricéfala ha provocado en el pasado.
De hecho, una de las luchas por el poder más intensas de la historia de la República Popular se produjo en los años 60 Mao Zedong, como líder del Partido, desplazó del poder al jefe de Estado Liu Shaoqui, lo cual dejaría vacante el puesto de presidente de la República Popular hasta los años ochenta.
Bajo la autoridad del presidente, se encuentra el Consejo de Estado, el órgano de Gobierno. A la cabeza de este Gobierno se encuentra el primer ministro, en la actualidad Wen Jiabao, que encabeza un gabinete con un número variable de viceprimeros ministros, cuatro en la actualidad, además de numerosos ministerios. Mientras que la Presidencia y el Consejo de Estado conforman el poder ejecutivo, el máximo órgano legislativo de la República Popular China es la Asamblea Popular Nacional, parlamento formado por más de tres mil delegados, que se reúne una vez al año.
En la República Popular China no existe un poder judicial independiente. Si bien desde finales de los setenta
ha habido intentos de desarrollar un sistema legal eficaz basado en gran medida en el sistema de derecho continental europeo, el poder judicial permanece subordinado a la autoridad del Partido. La excepción a este sistema se encuentra en los territorios de Hong Kong y Macao, donde se mantienen los sistemas jurídicos de origen británico y portugués respectivamente.
Junto al Partido Comunista de China, la República Popular permite las actividades de otros ocho partidos políticos. Sin embargo, estos partidos deben aceptar la autoridad del Partido Comunista y desempeñan un papel meramente consultivo y simbólico.
A pesar de las presiones de grupos de activistas por el pluripartidismo en
Hong Kong y en las comunidades chinas en el extranjero, los líderes del Partido Comunista siempre se han resistido a aceptar introducir elementos característicos de la democracia pluripartidista. Desde los años 80 existen elecciones en ámbitos locales, en las que se elige a los jefes de las aldeas. Este tipo de elecciones ha sido extendido recientemente a barriadas urbanas, y hay también elecciones para las asambleas populares del Partido de los ámbitos locales de términos municipales y distritos. Con todo, el sistema de designación de candidatos, que por lo general depende del Partido, hace que sean muchas las voces críticas con este sistema electoral.
En Hong Kong y Macao, por su parte, se celebran elecciones legislativas, pero sólo para elegir a un tercio de los miembros de los consejos legislativos de estas dos regiones administrativas especiales.